Contención de aguas contaminadas
En numerosas industrias, así como en algunas empresas artesanales, se pueden generar de forma accidental vertidos y aguas contaminadas que no pueden ser vertidas al medio o a la red de pública de saneamiento, debido a su ecotoxicidad.
La contención y almacenamiento de las aguas no aptas para ser vertidas debe cumplir una serie de requisitos, para evitar vertidos accidentales y la contaminación de terrenos circundantes o de acuíferos cercanos como consecuencia de las corrientes de escorrentía, así como daños a bienes públicos o de terceros.
A continuación se muestran las opciones para la contención de efluentes contaminados derivados de la actividad industrial con presencia de productos químicos peligrosos.
Reducción del impacto de derrames accidentales
El término “derrames accidentales” se refiere a:
Hablando de aguas residuales, los debidos a un volcado o rotura de un contenedor o tubería, el agua resultante de las medidas de emergencia para la extinción de un incendio en la planta y las corrientes derivadas de una eventual inundación. En cualquier caso, estamos hablando de contención de aguas contaminadas con productos utilizados en la industria o con subproductos de ella misma, y no de los vertidos de crudo o sus derivados debidos a accidentes marítimos o a la rotura de oleoductos.
También pueden producirse derrames accidentales mediante la rotura de grandes o pequeños contenedores en los que se almacene producto químico, accidentes al realizar la carga o descarga de camiones cisterna, etc.
Según el reglamento APQ, cualquier empresa que produzca, manipule o almacene productos que puedan generar un derrame de líquidos contaminantes al medio ambiente, deberá disponer de un sistema de contención cuya capacidad de retención sea mayor o igual a los valores siguientes:
- El 10% de la capacidad total almacenada
- El 100% de la capacidad del recipiente mayor
Además se debe garantizar la contención tanto los productos químicos como las aguas de contaminadas resultantes de la extinción de un incendio.
Tandem HSE diseña y suministra instalaciones de sistemas de contención de líquidos, adecuados para cumplir con los requisitos del reglamento APQ.
Instalaciones:
- Obturadores en tubería.
- Barreras de contención para puertas y muelles de carga.
Almacenamiento de productos químicos
El almacenamiento de productos químicos (APQ) debe llevarse a cabo cumpliendo con la legislación vigente en cada país. Estas leyes buscan minimizar la posibilidad de accidentes en el lugar de almacenamiento o en el trayecto hasta la cadena de producción, accidentes que pueden afectar a personas, a las instalaciones o tener un impacto medioambiental negativo.
Por un lado, existen los equipos de prevención, y por otro se habla de instalaciones de almacenamiento. Existen contenedores modulares diseñados para el almacenamiento de productos químicos que cumplen con el reglamento APQ. Dichos contenedores están equipados con sistemas de contención de derrames accidentales que puedan producirse en su interior.
Tandem HSE distribuye contenedores modulares para el almacenamiento de productos químicos de todo tipo.
Equipos:
- Almacenes prefabricados para productos químicos sin protección al fuego.
- Almacenes prefabricados para productos químicos inflamables y peróxidos orgánicos.
Nótese que, aun dentro de los almacenes prefabricados para un determinado tipo de residuo, se deben contemplar las indicaciones de prevención de riesgos laborales, que señalan las condiciones de temperatura, ventilación y ordenamiento de los productos, atendiendo al tipo de reactividad de cada sustancia. Por ejemplo, no se almacenarán juntos ácidos y bases fuertes, ni combustibles y comburentes, sino que deberá haber algún tipo de separación física entre ambos.
En resumen, la legislación obliga a los responsables de una planta industrial o de una planta piloto a la contención de los efluentes generados en la actividad normal de la instalación, pero también a los producidos en situaciones de emergencia o durante accidentes.
Esto hace necesario que la instalación cuente con diferentes equipos e instalaciones, para cubrir cualquier posible accidente y, a su vez, hacerlo de forma adaptada al tipo de vertido en cuestión y a su caudal.
También son obligatorios algunos equipos diseñados para velar por la seguridad de los trabajadores de la planta o del lugar de almacenamiento de los productos químicos.